La leche humana es el patrón de oro para la nutrición infantil, por su alto contenido en compuestos bioactivos que contribuyen al desarrollo de la microbiota intestinal y del sistema inmunitario del niño.  Sin embargo, no siempre es posible alimentar a todos los niños exclusivamente con leche materna.

The Biotics Family in Early Life (Pre-, pro-, sim- y postbióticos en edad temprana) es una guía Essential Knowledge Briefing de la editorial Wiley. Explica cómo puede el uso de probióticos, prebióticos, simbióticos y postbióticos ayudar a mejorar la salud infantil y reducir el riesgo de enfermedades más adelante.

Todos ellos son “componentes nutricionalmente activos que, cuando se consumen, pueden ejercer un efecto beneficioso sobre la salud del huésped”. El libro empieza ofreciendo una excelente perspectiva general de la fisiología del intestino del niño y el vínculo entre salud inmunitaria y salud intestinal. Los capítulos siguientes presentan cada uno de los diferentes tipos de “-bióticos” de manera detallada, centrándose en sus beneficios para la salud infantil.

Tras esta puesta en antecedentes, los autores proponen al lector abundante información sobre los prebióticos, unos sustratos que los microorganismos del huésped utilizan selectivamente y los probióticos, los microorganismos vivos en cuestión.

Los prebióticos (también llamados oligosacáridos), que se encuentran presentes en la leche materna de manera natural, podrían reducir el riesgo de infecciones en los niños. Como ya lo han demostrado estudios científicos anteriores, los prebióticos favorecen el crecimiento de las saludables Bifidobacterias en el intestino del niño, y mejoran la motilidad, el vaciamiento gástrico, y la textura de las heces. En los casos en que no es posible amamantar al bebé, se podrían añadir estos oligosacáridos prebióticos a las fórmulas infantiles para imitar la composición de la leche materna y favorecer el desarrollo de los microorganismos intestinales beneficiosos.

La investigación pone de relevancia que los postbióticos en los alimentos y las fórmulas infantiles pueden mejorar los síntomas digestivos

Los probióticos, al igual que los prebióticos, también son beneficiosos para la salud de los niños. Los beneficios de los probióticos difieren en función de la cepa bacteriana, pero en general, incluyen la protección contra las infecciones, la regulación del sistema inmunitario y la síntesis de elementos nutricionales como las vitaminas. Sin embargo, se sabe mucho menos acerca de sus mecanismos de acción subyacentes que de los de los prebióticos.

Los simbióticos son aquellos que combinan probióticos y prebióticos en alimentos y complementos alimenticios. Mientras que las bacterias probióticas normalmente no colonizan el intestino, los prebióticos administrados junto a probióticos pueden contribuir a la supervivencia de los probióticos durante su tránsito por el tracto gastrointestinal superior, favorecer su crecimiento y activar su metabolismo. En general, la administración de simbióticos podría potenciar los beneficios observados con la administración de prebióticos y probióticos por separado. 

El libro concluye con los menos conocidos, los postbióticos: unas moléculas producidas por las bacterias a través de la fermentación. Las bacterias actúan como “fábricas microbianas” productoras de moléculas beneficiosas para la salud que enriquecen los alimentos. Lo que caracteriza esencialmente a los postbióticos es que no es necesario consumir las bacterias vivas. A pesar de tratarse aún de un campo emergente, la investigación ha puesto de manifiesto que los postbióticos en los alimentos y las fórmulas infantiles tienen el potencial de mejorar los síntomas digestivos en los niños.

The Biotics Family in Early Life es un recurso muy recomendable, con referencias sólidas, para aquellos que quieran conocer mejor el intestino, el sistema inmunitario y el efecto de probióticos, prebióticos, simbióticos y postbióticos en la salud infantil.  Pre-, pro-, sim- y postbióticos suponen alternativas prometedoras para  imitar la funcionalidad de la leche humana y reforzar la inmunidad cuando la leche materna no sea una opción.

Referencia: The Biotics Family in Early Life. Edited by Seppo Salminen, Hania Szajewska, and Jan Knol. vol. 4, Wiley, 2019.