Este término hace referencia a los cientos de billones de bacterias que viven en el cuerpo humano y al lugar que estas habitan. A pesar de pertenecer a diferentes tipos y de estar presentes en nuestro sistema digestivo en cantidades diversas, actúan como un equipo, desempeñando un papel esencial en la digestión de los alimentos, el fortalecimiento del sistema inmunitario, la prevención de infecciones e incluso en el estado de ánimo y el comportamiento de las personas.